Trascendió la esta semana que uno de los coches auto-conducidos de Google tuvo su primer accidente durante un recorrido.
El vehículo se encontraba circulando en una muy transitada avenida en las cercanías de Mountain View, la sede de Google, cuándo al tratar de realizar una maniobra para evitar un obstáculo fue alcanzado por un autobús de transporte público.
En el video del incidente (que ya bajaron de YouTube) es posible ver al auto de Google que intenta dar una vuelta a la derecha y, cuando detecta un obstáculo en el trayecto -unas bolsas de arena- trata de regresar al carril izquierdo. Es entonces cuando el autobús lo alcanza.
En cierta forma Google intentó minimizar el accidente mediante un comunicado de prensa. Aseguran que el accidente se debió a que ambas partes asumieron hechos de forma equivocada: la computadora del auto asumió que el transporte le cedería el paso, mientras que el chofer del autobús pensó que el auto esperaría su paso para realizar la maniobra evasiva.
Este hecho es una clara muestra de la gran cantidad de decisiones que -en pocos segundos- es necesario tomar a la hora de conducir un vehículo de cualquier tipo y resalta lo difícil que podría ser llevar este proyecto hasta la ajetreada la realidad.
Sin embargo también, aseguró la empresa del buscador, abre una puerta a mejorar aún más el software de control.
Hay que decirlo, es el primer accidente luego de miles de horas de circular en las calles más conflictivas de California; un «llegue» de este tipo no es gran cosa y son muchos los automovilistas «expertos» que han sufrido algo similar.
Por supuesto que puede ser escandaloso y un pretexto para los detractores del desarrollo de Google, sin embargo el hecho de que haya sido un accidente tan circunstancial habla mucho sobre las capacidades de estos automóviles que, fuera de este, tienen un récord perfecto.
¿Conoces alguna flotilla que así lo tenga?