El Expresionismo en la pintura es una corriente de arte surgida a principios del siglo XX cuyo nombre la define: el intento de expresar los más interiores sentimientos. Hay que decir que las fronteras de este estilo con la de otros que se generaron hacia la misma época a veces no claras y se suele traslapar con otras corrientes.
La idea de estos artistas, es la de “expresar” una cierta desesperación ante una sociedad que poco a poco se “deshumaniza” ante la industrialización y la guerra. Un grito desesperado que surgió de la Europa central y oriental, sobre todo en esa Alemania de la posguerra, como lamento a los terrores de la modernidad.
¿El ejemplo más claro de este movimiento?
El Grito, de Edvard Munch.
Y si el movimiento trascendió varias formas de arte, un claro ejemplo de ello es el cine y las creaciones de Fritz Lang, Robert Wiene y F.W. Murnau, es en la pintura donde encontramos las más claras expresiones.
Para conocer más sobre esta corriente pictórica la recomendación es asistir al Palacio de Bellas Artes para conocer la obra de 25 pintores, un préstamo del Museo de Arte Moderno de Nueva York y que incluye 26 obras del icónico Edvard Munch.
Esta es la primera vez en la historia que los habitantes de la Ciudad de México podrán ver estas obras, por lo que vale muchísimo la pena asistir a Bellas Artes para mirar cuadros y grabados que normalmente están en Nueva York
La obra expresionista estará en nuestro país hasta el 2 de septiembre; el horario es de martes a domingo de 10 a 17.30 y el costo de admisión de 43 pesos (con los consabidos descuentos a profesores y estudiantes).